¡Hola pixeles!
Se que han pasado bastantes días desde la conclusión de la expo, pero hasta ahora no he tenido ni un ratiro para poder sentarme aquí con vosotros y contaros que me pareció, que cosas interesantes tuvo y que fallos encontré en ella.
También tengo que deciros que fue la primera vez que pude visitar esta exposición, por lo que no puedo compararla con las ediciones de años anteriores, así que, os lo comentaré desde el desconocimiento de como se desarrollaron las anteriores, pero por supuesto podéis dejar vuestro comentario al final del post, para decirme si estoy equivocado en algo o si este año estuvo mejor en algunos aspectos que quizás yo critique.
¡VAMOS AL LÍO!
Lo primero que me llamo la atención cuando llegue al reciento donde se realizaba dicha exposición fue la cantidad de gente que había conseguido reunir, la verdad, no sabía que en Almería había tantísima gente interesada en este tipo de cosas (también soy consciente de que personas de otras localidades pudieron acudir al evento).
Una vez dentro, vi el primer problema, el espacio. (Dicho espacio consistía básicamente en un campo de fútbol sala, ya he dicho que no se las dimensiones que tendría el año pasado, pero para mi gusto lo veía un poco pequeño.) Aunque realmente, todos los stands estaban bien repartidos, dejando pasillos mas o menos fluidos por los que poder pasar y todo el alrededor estaba constituido por gradas con sillas en las que poder sentarse.
Con este espacio limitado, en apenas media hora ya lo había visto todo y mira que me paraba en todos los puestos y «lloraba» porque todo lo que tenían me gustaba, pero obviamente no podía llevármelo todo, ese creo que es el principal problema que sufrimos muchos de nosotros, ¿no creéis?
En los puestos había de todo:
Desde figuritas que en su mayor parte eran de Naruto (había muuuuuuchísimas) y de One piece, pasando por peluches elaborados con lana (muy adorables *o*) y vasos pintados con diversidad de motivos.
- Pero no sólo teniamos stands, también había una zona llena de ordenadores y consolas en las que podías quedarte y ver como jugaban y si llegabas a tener muchísima suerte (y me gustaría remarcar lo de muchísima ya que siempre que pasaba por allí aquello estaba lleno), podías llegar hasta jugar un ratito.
- Hemos paseado y jugado,estamos cansados y tenemos sed o se nos está despertando el apetito. Todas estas cosas las tuvieron en cuenta los organizadores del evento y pusieron una barra en la que te servían platos y bebidas japonesas.
- Sumándole el pequeño escenario que estaba situado al final de la exposición y los numerosos talleres que podías encontrar hacía que tu experiencia no fuera sólo de media hora, que era lo que como os dije antes, lo que se tardaba mas o menos en ver todos los puestos.